El café frappé (del griego φραπέ, frapé) es un café con hielo cubierto de espuma elaborado a partir de café instantáneo atomizado. Es muy popular en Grecia y Chipre, especialmente durante el verano, si bien se ha extendido a otros países. Forma la base del Iced Cappucino (‘capuchino helado’) estadounidense y el frappuccino europeo. El término proviene del francés frappé, que significa, en este contexto, «agitado» o «helado».
El frappé tiene su origen en la Feria Internacional del Comercio de Tesalónica de 1957. Yannis Dritsas, estaba exhibiendo un nuevo producto para niños, una bebida de chocolate que se preparaba instantáneamente mezclando el cacao con leche y agitándola en una coctelera. Dritsas Dimitris Vakondios estaba buscando una manera de tomar su habitual café instantáneo del descanso pero no encontraba agua caliente, así que mezcló el café con agua fría en la coctelera.
Este experimento improvisado dio origen a la popular bebida griega. El frappé ha sido comercializado en Gracia, llegando a ser la bebida más popular del país. Recientemente, El frappé ha sido calificado de café nacional griego, y se sirve en virtualmente todas las cafeterías.
El café instantáneo atomizado casi no contiene grasa, sino solo diminutas partículas (sólidos de café), algunas moléculas responsables del aroma y el sabor, y por supuestocafeína. Cuando se disuelve, el café atomizado forma un coloide más simple y estable que el café hervido de la manera tradicional. Esto permite la creación de la característica capa espumosa gruesa que lo cubre. Esta capa se parece a la espuma del café expreso, pero es mucho más espesa y tiene una composición diferente. Puede ser caracterizada principalmente como un coloide de tres fases en el que las diminutas burbujas se mantienen unidas gracias a los sólidos de café.
La ausencia de grasa (o el significativamente menor contenido en grasa respecto al café tradicional) hace al sistema más estable y las burbujas no se colapsan de la misma forma que en la espuma del café expreso. Poco después de que se cree la espuma sucede un proceso de espesado, en el que las moléculas de agua son constantemente empujadas fuera de la mezcla espumosa. Las burbujas quedan muy próximas entre sí y la espuma casi se solidifica. Este proceso lleva entre unos 2 a 10 minutos, dependiendo fuertemente del proceso de agitado durante la preparación. Cuando casi toda el agua es expulsada las burbujas quedan tan juntas que empiezan a unirse y crear burbujas mayores.
En este punto la presencia de grasa (un agente hidrófobo) puede acelerar significativamente el proceso de colapso, lo que supone la creación de una espuma más ligera con un diámetro de burbuja medio superior a 4 mm. Esta es la razón de que no sea posible hacer un buen frappé en muchos países, salvo que se disponga de café atomizado. El empleo de una coctelera manual posibilita la creación de burbujas más finas, lo que aumenta el tiempo de duración de la espuma. Los mejores cafés frappé suelen considerarse aquellos que tienen las burbujas más pequeñas y una capa de espuma de unos 3 a 5 cm de grosor.
El frappé se elabora en tres grados de dulzor, determinados por las cantidades de azúcar y café usados. Estos son: glykós (γλυκός, «dulce», 2 cucharaditas de café y 4 de azúcar), métrios (μέτριος, «medio», 2 cucharaditas de café y 2 de azúcar) y skétos (σκέτος, «solo», 2 cucharaditas de café y sin azúcar). Todas las variedades pueden servirse con leche evaporada (με γάλα, me gála, «con leche»), en cuyo caso pueden llamarse φραπόγαλο (frapógalo).
A veces se elaboran variedades con kahlúa u otros licores, así como leche con chocolate. Muchos restaurantes añaden una bola de helado de vainilla al frappé en lugar de leche. Aunque no son técnicamente frappé (pues no se agitan), algunas variantes se remueven con una cuchara, creando un textura ligeramente diferente y, según algunos, cambiando el sabor.
En 1.991, Michael Rubin, creó The Original Frappé Mix, bajo la marca Cappuccine. Durante 22 años, Cappuccine ha sido marcador de tendencias en Frappés gourmet. Ganador de múltiples premios, ha ido llenando las cafeterías de medio mundo. Cappuccine fue precursor de las primeras mezclas de café para granizados. Desde entonces, cadenas especializadas, tiendas de productos gourmet, hoteles de cinco estrellas, heladerías y cafeterías alrededor del mundo disfrutan de las creaciones de Cappuccine.
Las innovadoras mezclas de frappés de Cappuccine, preparadas únicamente con ingredientes de la mejor calidad, están listas para su consumo tanto en frío como en caliente. De fácil elaboración, desde mezclarlo con una simple cuchara hasta batirlo en batidora o elaborar un refrescante granizado. También se pueden usar como base para creaciones de frappés, a gusto del consumidor.
En 2.012, Francisco Pérez, viendo su gran aceptación en su negocio local Yogurtmanía, decide iniciar la comercialización y distribución de los frappés de Cappuccine bajo el nombre de Frappemanía. Después de un año, agradecemos a los más de 200 cafeterías, heladerías, creperías, cocktelerías y hoteles, la confianza depositada en Frappemanía y no dudamos que cada vez serán más.
Nuestro lema es : Seducimos tu paladar. Aquellos que los han degustado nos han transmitido que su sabor te hace revivir aquel viaje soñado, como el Té Spiced Chai selección de mezclas de exóticas especias y el incomparable sabor del mejor té negro earl grey, o el Café Mocha Chip elaborado con el mejor chocolate azteca y exquisito café colombiano con trocitos de chocolate puro que te trasladan al antiguo mundo azteca.
Os invitamos a visitar nuestra web: www.frappemania.es y conocer más sobre nosotros.
Iremos añadiendo recetas de frappés en nuestro blog.
¡Hasta pronto!